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Preguntas frecuentes
Registro de Información Social (RIS)
RIS Investigación
El Ministerio de Desarrollo Social y Familia toma las precauciones necesarias para que los datos a los que accedan las personas investigadoras sean indeterminados y que se sustraigan datos indeterminables, de manera de asegurar la efectiva protección a la privacidad de las personas que figuran en dicho registro. En este sentido, los datos no son entregados a las personas investigadoras, sino que ellas trabajan en una oficina del Ministerio, en un computador securitizado y aislado de la red, desde donde acceden a las bases de datos autorizadas y a los programas disponibles para tratarlas.
Para mayor detalle, se puede revisar la Política de Privacidad ministerial.
El acceso a los datos se efectúa a través de un computador aislado y securitizado, bajo los controles técnicos que para estos efectos disponga la Subsecretaría de Evaluación Social (SES). A ese computador se accede de manera presencial en las oficinas de la SES en Catedral 1575, Santiago.
Dicho acceso se habilita mediante la generación de credenciales personales y nombradas para cada una de las personas investigadoras que se determinen en el marco del convenio suscrito para cada estudio.
Para la realización de todos los estudios se cuenta solo con 12 computadores. Por tanto, los estudios harán uso compartido del equipamiento disponible, debiendo agendar el uso de los recursos.
Para mayor detalle se puede consultar en el Manual de procesos de acceso a datos del Registro de Información Social, RIS Investigación.
No se permite el acceso remoto a los datos para el desarrollo de la investigación.
Para los estudios que se deban realizar en regiones distintas de la Metropolitana, se evaluará la factibilidad de habilitar instalaciones en las Secretarías Regionales Ministeriales del Ministerio de Desarrollo Social y Familia.
En el computador aislado seguro estarán disponibles los datos autorizados en el convenio de manera innominada. Además, dicho computador tendrá instaladas herramientas de procesamiento de datos, como Python y R, para la realización de análisis. Una vez que se obtengan resultados como tablas de resumen, estadísticas, gráficos, entre otros, la universidad podrá solicitar a la contraparte designada para estos efectos en el convenio, la verificación de que dichos resultados cumplen con ser indeterminados e indeterminables respecto de los datos personales. Tras dicha verificación, la contraparte de la Subsecretaría de Evaluación Social hará entrega de esos resultados a la contraparte de la universidad.
Para mayor detalle se puede consultar en el Manual de procesos de acceso a datos del Registro de Información Social, RIS Investigación.
Sí, es posible integrar bases de datos de levantamientos realizados como parte de otros estudios a los registros administrativos del RIS. En la presentación de la solicitud deberá señalarse esta necesidad y mostrarse la autorización para hacer uso de dichos datos en este contexto.
El Ministerio evaluará el tenor de los datos a incorporar con el fin de verificar que como Ministerio se cuenta con las atribuciones legales para hacer tratamiento de esos datos en el ámbito de sus funciones.
Adicionalmente, se debe tomar en consideración que en tales casos, la preparación de las bases de datos conllevará un tiempo de procesamiento mayor y podría conllevar la eliminación de parte de los datos que se quiera agregar si, por sí mismas o combinadas, se transforman en una llave única que potencialmente permita la reidentificación de personas u hogares específicos.
Esto debido a que se deben aplicar los algoritmos para hacer indeterminables e indeterminadas las bases de datos solicitadas y las bases de datos que deben ser integradas. Una vez terminada la investigación, las bases de datos provistas por los investigadores serán eliminadas.
No, en RIS Investigación solo pueden postular personas investigadoras chilenas o extranjeras con el apoyo de universidades chilenas acreditadas institucionalmente y en el área de investigación.
Una persona investigadora de una universidad extranjera sí podría hacer un convenio con una universidad chilena para postular a RIS Investigación. Para lo anterior, la persona investigadora chilena o extranjera que ejerza como jefatura del proyecto, deberá presentar la correspondiente Carta de solicitud firmada por el Rector de una universidad chilena acreditada institucionalmente y en el área de investigación, y el Certificado de Idoneidad emitido por el Comité de Ética o instancia que cumpla ese rol en la referida universidad chilena con la que postulará a RIS Investigación.
Observatorio Social
La Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN) es una encuesta a hogares realizada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia (antes Ministerio de Planificación, MIDEPLAN) que es levantada de manera regular en el país desde el año 1987.
Sus objetivos son los siguientes:
- Conocer periódicamente la situación socioeconómica de los hogares y de la población que reside en viviendas particulares, en aspectos como: composición de hogares y familias, educación, salud, vivienda, trabajo e ingresos.
- Contar con diagnósticos actualizados, especialmente, sobre situación de grupos prioritarios de la política social: niños, niñas y adolescentes, jóvenes, personas mayores, mujeres, pueblos indígenas, personas en situación de discapacidad y de dependencia, entre otros.
- Estimar el porcentaje de la población y de los hogares en situación de pobreza por ingresos y/o multidimensional, y la desigualdad de ingresos.
- Identificar carencias y demandas de la población en las áreas señaladas, y evaluar brechas entre segmentos sociales y ámbitos territoriales.
- Estimar cobertura, focalización y distribución del gasto fiscal de principales programas sociales de alcance nacional entre los hogares, según ingresos.
La encuesta tiene cobertura a nivel nacional, entregando información representativa de hogares y población residente en viviendas particulares, tanto en zona urbana como en zona rural.
La información recogida por la encuesta es de carácter anónimo y confidencial, en conformidad con lo dispuesto por la ley N° 17.374 sobre secreto estadístico.
Tanto las bases de datos innominadas, como la documentación metodológica y resultados de la Encuesta son de acceso público y gratuito para toda la ciudadanía, en cumplimiento de la ley N° 20.285 sobre acceso a la información pública.
Las instituciones que participan en la realización de la Encuesta CASEN son:
- El Ministerio de Desarrollo Social y Familia (ex Ministerio de Planificación), institución a cargo de la dirección y supervisión directa de la encuesta en todas sus etapas
- Un proveedor externo contratado para realizar el levantamiento de la Encuesta, organismo que desde el año 2009 es seleccionado a través de un proceso de licitación pública.
- El Instituto Nacional de Estadísticas (INE), institución que desde el año 2011 (mediante la suscripción de convenios de transferencia técnica con el Ministerio de Desarrollo Social y Familia) provee el marco muestral y colabora en los procesos de diseño, selección y enumeración de la muestra y cálculo de factores de expansión.
- Un panel de expertos integrado por académicos e investigadores que, desde el año 2013, cumple con el mandato de acompañar y supervisar todas las etapas del desarrollo de la Encuesta.
Adicionalmente, desde el año el Ministerio de Desarrollo Social y Familia ha contratado, a través de procesos de licitación pública, a proveedores externos con el objetivo de ejecutar procesos de supervisión asociados al levantamiento de la Encuesta.
La Encuesta CASEN es realizada regularmente por Ministerio de Desarrollo Social y Familia (antes Ministerio de Planificación, MIDEPLAN) desde el año 1987, cada 2 ó 3 años.
Al respecto, cabe tener en cuenta la siguiente cronología:
- En el año 1985 se llevó a cabo una primera experiencia piloto.
- La primera versión de la Encuesta CASEN fue levantada en el año 1987.
- Entre los años 1990 y 2000, el levantamiento de la Encuesta CASEN se efectuó cada 2 años (1990, 1992, 1994, 1996, 1998 y 2000).
- Entre los años 2000 y 2009, el levantamiento de la Encuesta CASEN se efectuó cada 3 años (2000, 2003, 2006 y 2009).
- A contar del año 2009 y hasta la última versión realizada a la fecha, el levantamiento de la Encuesta CASEN se efectuó cada 2 años (2009, 2011, 2013, 2015 y 2017).
El tamaño de la muestra y su nivel de precisión ha variado en el tiempo, dependiendo del diseño muestral utilizado en cada versión de la encuesta. Es importante destacar que todas las versiones de la Encuesta CASEN realizadas a contar del año 2011 han fijado como variable de interés la tasa de pobreza por ingresos (porcentaje de población en situación de pobreza por ingresos), por lo que los niveles de error asociados a la estimación son aplicables exclusivamente a la evaluación de dicho indicador.
La información relativa al tamaño muestral y al nivel de error se encuentra detallada en documentos metodológicos de la Encuesta CASEN de cada año.
Para la estimación de otros indicadores con datos de la Encuesta CASEN, es pertinente evaluar su precisión considerando medidas estadísticas apropiadas como es el caso del error estándar (SE) o el coeficiente de variación (CV).
Sí. Las bases de datos innominadas de la Encuesta CASEN realizadas a contar del año 1990 se encuentran disponibles de manera libre y gratuita para su descarga a través de este sitio web en formatos de software estadístico (SPSS y Stata), junto a sus respectivos libros de códigos y documentación metodológica para uso de investigadores/as, estudiantes, profesionales y público en general.
Si bien ambos son de responsabilidad del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, se trata de instrumentos independientes entre sí y que cumplen objetivos diferentes.
La Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN) es una encuesta que se realiza de manera regular en el país desde el año 1987 con el objetivo de conocer periódicamente la situación socioeconómica de los hogares y de la población que reside en viviendas particulares, en aspectos tales como, composición de hogares y familias, educación, salud, vivienda, trabajo e ingresos. Además, la información de la Encuesta CASEN es utilizada como fuente oficial para la medición de la pobreza. Los hogares encuestados corresponden a una muestra seleccionada de manera aleatoria y la información recogida es completamente anónima y confidencial.
Por su parte, el Registro Social de Hogares es el sistema que reemplazó a la Ficha de Protección Social desde el 01 de enero de 2016 y tiene por objetivo apoyar la postulación y selección de beneficiarios de las instituciones y organismos del Estado que otorgan prestaciones sociales. A través de este sistema, (que considera la información aportada por una persona del hogar mayor de 18 años y los datos administrativos que posee el Estado), los hogares son ubicados en un tramo de Calificación Socioeconómica, lo que les permite postular y acceder a diferentes beneficios sociales. Todos los hogares que deseen ingresar o actualizar sus datos en el Registro Social de Hogares pueden hacerlo, consultando la información disponible en la página web www.registrosocial.cl, o bien a través de la Municipalidad correspondiente al domicilio del hogar.
Al ser información producida con recursos públicos, tanto los investigadores como la ciudadanía en general pueden utilizar los datos de la Encuesta CASEN para fines de investigación e incluir sus resultados en el contexto de publicaciones.
No obstante lo anterior, esta información debe ser citada de manera precisa a través del uso de referencias o pie de fuente, de acuerdo a formatos estandarizados y adecuados al carácter de cada publicación.
En el caso de citarse resultados o información procesada de la Encuesta CASEN que haya sido publicada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia en tablas o documentos de resultados de carácter oficial, cabe reconocer a esta institución como fuente de origen de los datos e identificando, además, el año correspondiente a la versión de la Encuesta CASEN en la que está basada la información publicada (por ejemplo: Fuente: Ministerio de Desarrollo Social y Familia en base a datos Encuesta CASEN 2015).
Por otro lado, en el caso de usarse información que haya sido objeto de procesamiento o análisis por parte de terceros (personas u otras instituciones públicas o privadas), debe acreditarse, en primer lugar, a la persona o institución responsable de la elaboración de dicho análisis y luego mencionar la Encuesta CASEN y el año de la encuesta al que corresponden dichos resultados (por ejemplo: Fuente: elaboración propia en base al análisis de datos de la Encuesta CASEN 2015).
Información y Estadísticas de la Encuesta CASEN
Sólo en algunos años y, únicamente, para el subconjunto de comunas identificadas como representativas según las especificaciones del diseño muestral de cada versión de la Encuesta. Si bien las bases de datos de la Encuesta CASEN incluyen la variable comuna y un factor de expansión comunal (que permite realizar inferencia estadística a este nivel), sólo en algunos años su diseño muestral ha considerado a las comunas como dominio de representación y ha establecido objetivos de precisión para las estimaciones producidas en esta escala.
Respecto de la posibilidad de generar estadísticas a nivel comunal con datos de la Encuesta CASEN, es importante tener en cuenta los siguientes antecedentes:
- Si bien la Encuesta CASEN ha sido diseñada para realizar estimaciones representativas a nivel nacional, no todas las comunas del país tienen presencia en la muestra. El número de comunas presentes ha variado a través del tiempo y, desde el año 2011 en adelante, son 324 comunas las que se incluyen en el levantamiento. Las comunas excluidas son aquellas definidas como Áreas de Difícil Acceso en el marco muestral provisto por el Instituto Nacional de Estadísticas.
- Entre los años 1990 a 2009, el diseño muestral de la Encuesta CASEN definió un conjunto de comunas “auto-representadas”, que debían tener presencia en la muestra con un número mínimo de observaciones (hogares encuestados) para poder realizar estimaciones independientes a nivel comuna, en atención a su importancia demográfica y socioeconómica dentro de cada provincia o región. Pese a lo anterior, dicho diseño muestral no garantiza que las estimaciones obtenidas a nivel comunal satisfagan estándares de precisión homogéneos para todo tipo de indicadores ni para todas las comunas auto-representadas, por lo cual se recomienda al usuario evaluar cuidadosamente la precisión de las estimaciones obtenidas. El detalle de comunas auto-representadas en cada versión puede ser encontrada en los respectivos documentos metodológicos relativos al diseño muestral de cada Encuesta.
- A contar del año 2011, se realizan cambios en el diseño muestral de la Encuesta, los que tuvieron como propósito maximizar la precisión de las estimaciones realizadas a nivel nacional, por zona (urbana y rural) y por regiones, para un indicador en particular: la tasa de pobreza por ingresos (porcentaje de población en situación de pobreza por ingresos). A partir de esta versión, la distribución de la muestra y, por ende, el número de hogares encuestados en cada comuna, pasa a ser determinado en función de los objetivos de precisión definidos a nivel nacional, regional y por zona para dicho indicador.
- En congruencia con este cambio, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, deja de publicar indicadores comunales basados en estimaciones directamente obtenidas con datos de la Encuesta e inicia una serie de estimaciones de la tasa de pobreza a nivel comunal basadas en una aplicación de la Metodología de Estimación para Áreas Pequeñas (metodología SAE, por su sigla en inglés) que combina información recolectada por la encuesta con datos administrativos y censales con el objetivo de mejorar la calidad y precisión de las estimaciones. Las estimaciones producidas con esta metodología constituyen las estimaciones oficiales de pobreza a nivel comunal y son empleadas para procesos de focalización y asignación de recursos a escala comunal para diferentes programas y políticas.
- Sin perjuicio de lo anterior, las bases de datos de las versiones 2011 y 2013 incluyen un factor de expansión comunal que permite a los investigadores y usuarios/as de la Encuesta CASEN obtener sus propias estimaciones a este nivel, dejando a criterio de éstos la evaluación de la precisión y de la pertinencia de publicar y/o emplear tales estimaciones para diversos fines.
- A contar del año 2014 se establece el propósito de intercalar versiones de la Encuesta CASEN con representatividad nacional, regional, por zona y comunal, y de versiones con representatividad sólo a nivel nacional, regional y por zona. Siguiendo esta pauta, la Encuesta CASEN 2015 consideró un diseño muestral con representatividad para un subconjunto de 139 de las 324 comunas en las que tuvo cobertura, mientras que la Encuesta CASEN 2017 no incluyó a las comunas como dominios de representación, estableciendo un diseño muestral similar al de las versiones 2011 y 2013.
En suma, considerando estos antecedentes, se plantean las siguientes recomendaciones:
- Si bien es posible obtener estimaciones de distintos indicadores socioeconómicos y demográficos a nivel comunal en todas las versiones de la Encuesta, se recomienda evaluar las estimaciones obtenidas bajo criterios estadísticos rigurosos, considerando al menos los siguientes:
- Número de casos: se debe evaluar si la estimación está sustentada en un número mínimo de observaciones muestrales (número de hogares o población en la muestra con el que fue construida la estimación, sin utilizar factor de expansión). El Ministerio de Desarrollo Social y Familia considera como criterio de referencia para sus publicaciones que todas las celdas cuenten con al menos 50 casos muestrales.
- Precisión: como referencia, se sugiere analizar el coeficiente de variación y/o el error estándar según el tipo de variable estimada. Al respecto, el Instituto Nacional de Estadísticas fija como criterio que, si las estimaciones han sido elaboradas con un número relativamente alto de observaciones muestrales, se pueden considerar confiables aquellas estimaciones en las que se verifica un coeficiente de variación igual o inferior a 15%.
- Asimismo, se hace presente que todas las estimaciones realizadas a nivel comunal deben considerar siempre el uso del factor de expansión comunal (expc).
- En relación a estimaciones comunales de la tasa de pobreza, debe considerarse como fuente oficial la serie de datos que ha sido construida por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia utilizando la metodología de estimación para áreas pequeñas (SAE) (para las comunas con presencia en la muestra CASEN) y metodología de imputación de medias por conglomerados (para comunas que no son cubiertas en la muestra de CASEN). Esta serie está disponible desde el año 2011 para la tasa de pobreza por ingresos y desde el año 2015 para la tasa de pobreza multidimensional, con cobertura en 345 comunas.
La información estadística entregada por la Encuesta CASEN permite aproximarse al valor de distintos indicadores a partir de la estimación de los mismos en una muestra aleatoria del total de hogares residentes en viviendas particulares. Por lo tanto, debe tenerse presente que las estimaciones obtenidas para cualquier indicador a partir de datos de la Encuesta CASEN están sujetas a error muestral.
A fin de evaluar la precisión de las estimaciones obtenidas, es pertinente considerar las herramientas de la estadística inferencial, a través de las cuales pueden efectuarse pruebas de contraste de hipótesis y llegar a conclusiones sobre si las diferencias observadas para distintas estimaciones o subgrupos de población son estadísticamente significativas dado un cierto nivel de confianza.
Existe un conjunto de pruebas e indicadores de precisión que pueden implementarse utilizando software estadístico. Para su correcta aplicación, debe tomarse en cuenta las características del diseño muestral de la Encuesta CASEN, el que se caracteriza como un diseño complejo. Los softwares de procesamiento estadístico más utilizados disponen de módulos específicos que permiten estimar varianzas complejas en función de aquellas variables que identifican a los estratos, los conglomerados, la fracción de muestreo y el factor de expansión establecidos en el diseño de la Encuesta.
Para el objetivo de evaluar la precisión de las estimaciones, es recomendable considerar indicadores tales como el coeficiente de variación y/o el error estándar según el tipo de variable estimada, además de observar la amplitud del rango del intervalo de confianza de la estimación (diferencia entre el límite inferior y el límite superior de la estimación obtenida).
Otro aspecto a considerar es que los resultados entregados por la Encuesta CASEN son expandidos para dar cuenta del total de hogares y de población residente en viviendas particulares a nivel nacional. Sin embargo, el número total de casos expandidos es diferente del número total de casos observados (número de hogares o población en la muestra). Una estimación realizada con un número pequeño de casos es menos confiable que una estimación sustentada en un gran número de observaciones muestrales.
Este punto resulta especialmente sensible cuando se realizan estimaciones referidas a subgrupos de población, ya que las estimaciones se apoyan en un conjunto reducido de casos muestrales en comparación con el total de hogares y de población presente en la muestra nacional.
Como criterios de referencia para evaluar la precisión y confiabilidad de las estimaciones, se indican los siguientes:
- Número de casos: se debe evaluar si la estimación está sustentada en un número mínimo de observaciones muestrales (número de hogares o población en la muestra con el que fue construida la estimación, sin utilizar factor de expansión). El Ministerio de Desarrollo Social y Familia considera como criterio de referencia para sus publicaciones que todas las celdas cuenten con al menos 50 casos muestrales.
- Precisión: como referencia, se sugiere analizar el coeficiente de variación y/o el error estándar según el tipo de variable estimada. Al respecto, el Instituto Nacional de Estadísticas fija como criterio que, si las estimaciones han sido elaboradas con un número relativamente alto de observaciones muestrales, se pueden considerar confiables aquellas estimaciones en las que se verifica un coeficiente de variación igual o inferior a 15%.
Dado el carácter de la información de la Encuesta CASEN, sus resultados están sujetos a error muestral. Por lo mismo, si bien para distintos grupos de hogares o de población pueden obtenerse valores diferentes al estimar un mismo indicador, es necesario evaluar si esas diferencias son puntuales (atribuibles al azar en la selección de la muestra) o, efectivamente, corresponden a diferencias que resultan estadísticamente significativas dado un cierto nivel de confianza.
Para evaluar diferencias entre distintas estimaciones, se debe tomar en cuenta las características del diseño muestral de la Encuesta CASEN 2015 (el que se caracteriza como un diseño complejo) y emplear módulos de procesamiento estadístico que permitan estimar varianzas complejas en función de aquellas variables que identifican a los estratos, conglomerados, la fracción de muestreo y los factores de expansión correspondientes.
Para comparar las estimaciones obtenidas para dos grupos independientes de hogares o de población (incluyendo comparaciones entre grupos para un mismo año y comparaciones de un mismo grupo para diferentes años), el Ministerio de Desarrollo Social y Familia.
Como estándar para el análisis, se recomienda el uso de la prueba de medias (prueba t), asociada a un nivel de significancia de 0.05 (nivel de confianza del 95%). Este procedimiento toma como base las medias del indicador en el numerador y la raíz de las varianzas asociadas a este último en el denominador. El valor obtenido es comparado con el valor estándar de la tabla normal asociado a una muestra grande cuando la prueba es a 2 colas, que corresponde a 1.96, cuando el nivel de confianza elegido es de 95%. Este método es pertinente para analizar diferencias en estimaciones producidas para muestras de, a lo menos, 200 casos.
Los datos de la Encuesta CASEN se basan en una muestra aleatoria de hogares y población residente en viviendas particulares. Con el objeto de que los datos de la muestra puedan ser usados para representar su expresión en términos del total de población y hogares del país, se construyen factores de expansión que asignan una ponderación a cada caso incluido en la muestra. Desde la versión 2011 de la Encuesta CASEN, estos factores de expansión han sido elaborados por el Instituto Nacional de Estadísticas y su construcción es consistente con las proyecciones demográficas entregadas por el INE para el total de población residente en viviendas particulares a la fecha de levantamiento de la Encuesta.
Si bien se han incluido distintos tipos de factores de expansión dependiendo de la versión de la Encuesta, usualmente se entregan dos tipos de factores de expansión: los factores de expansión regionales (expr) y los factores de expansión comunales (expc). Al aplicar cada uno de estos factores de expansión sobre la muestra, se llega a resultados diferentes, por lo que debe conocerse su objetivo y utilidades.
El factor de expansión regional permite representar al total de la población residente en viviendas particulares a nivel nacional y regional, por lo que se emplea de modo generar para producir estimaciones a estos niveles de agregación.
El factor de expansión comunal, en tanto, permite generar un tipo de expansión que considera la suma de población residente en las comunas cubiertas por la muestra, en que todos los individuos residentes en un mismo conglomerado (manzana o sección) comparten el mismo ponderador. Dicho factor de expansión debe ser usado para obtener estimaciones a nivel comunal y excluye a la población residente en comunas no encuestadas.
Adicionalmente, desde el año 2015 se entrega un factor de expansión específico para el análisis de preguntas sobre Orientación Sexual e Identidad de Género (expr_div ). Estas preguntas, a diferencia del resto de ítems de la encuesta se aplican de manera exclusiva a población de 18 años y más presente al momento de aplicar la Encuesta. Este factor de expansión busca controlar el sesgo de selección que se produce debido a que no todo los integrantes de 18 años y más tienen la misma probabilidad de estar presentes en el momento de la encuesta, asegurando que las estimaciones obtenidas reflejen adecuadamente la distribución de estos atributos en todo el universo de población al que están dirigidas ambas preguntas.
No. La Encuesta CASEN es un instrumento aplicado a una muestra aleatoria y anónima de hogares seleccionada sobre la base del marco muestral de secciones y manzanas del Instituto Nacional de Estadísticas. Con objeto de resguardar la confidencialidad de la información recogida y evitar que terceros puedan tener acceso a información que facilite la identificación individual de los hogares encuestados (información bajo secreto estadístico, conforme a la ley N° 17.374), el Ministerio de Desarrollo Social y Familia no toma conocimiento ni almacena información relativa a direcciones, nombres u otra información que permita establecer la localización de los hogares encuestados.
Dado lo anterior, la información recopilada sólo puede ser georreferenciada a una escala agregada, empleando las variables de identificación que son almacenadas en la base de datos principal de la Encuesta CASEN y que corresponden con los dominios geográficos considerados en el diseño metodológico de la misma, vale decir: región, zona (urbana o rural) y comuna.
Por otra parte, es pertinente precisar que, en términos estadísticos, la información entregada por la Encuesta no es representativa a niveles inferiores a los dominios de representación que han sido definidos en el diseño muestral de la Encuesta.
A contar de su versión 2011, la Encuesta CASEN ha tenido cobertura en 324 de las 346 comunas del país. Se exceptúa de la muestra a un conjunto de 22 comunas del país que son definidas como Áreas de Difícil Acceso (ADA) por el Instituto Nacional de Estadísticas. Este grupo incluye a General Lagos, Colchane, Ollagüe, Juan Fernández, Isla de Pascua, Cochamó, Chaitén, Futaleufú, Hualaihué, Palena, Lago Verde, Guaitecas, O’Higgins, Tortel, Laguna Blanca, Río Verde, San Gregorio, Cabo de Hornos (Ex Navarino), Antártica, Primavera, Timaukel, Torres del Paine.
No. Los hogares encuestados por la Encuesta CASEN son seleccionados a partir del marco muestral de secciones y de manzanas provisto por el Instituto Nacional de Estadísticas, que incluye sólo viviendas particulares. Por lo tanto, la información que entrega la encuesta es representativa a nivel nacional de los hogares y población que residen en viviendas particulares.
Pese a que hogares y personas residentes en campamentos tienen probabilidad de ser encuestados, la Encuesta CASEN no contempla entre sus objetivos específicos la medición de hogares y población residente en campamentos. Entre las principales restricciones a considerar, cabe debe tener presente lo siguiente:
- Debido al alto dinamismo del fenómeno de los campamentos, la cobertura de viviendas emplazadas en este tipo de asentamientos no está asegurada en la Encuesta, pues depende del nivel de actualización y cobertura del marco muestral desde el que se seleccionan las viviendas (marco muestral de secciones y manzanas del INE).
- Asimismo, cabe tener en cuenta que el diseño muestral de la Encuesta excluye a manzanas con menos de 7 viviendas.
Si bien con datos recolectados por la Encuesta CASEN es posible aproximarse de modo parcial a la identificación de población y hogares residentes en viviendas precarias (identificadas como viviendas irrecuperables, algunas de las cuales se encuentran emplazadas en campamentos), es pertinente tener en cuenta que existen otros instrumentos más adecuados para medir este fenómeno (como es el caso de catastros o encuestas específicas) cuyo objetivo principal es la cuantificación y/o caracterización de viviendas y hogares residentes campamentos.
Se consideran miembros de un hogar a todas aquellas personas que, siendo residentes de una misma vivienda, pueden tener o no vínculos de parentesco entre sí y habitualmente hacen vida en común, es decir, se alojan y se alimentan juntas. Dicho de otra forma, habitan en la misma vivienda y tienen presupuesto de alimentación común.
Un hogar puede estar constituido por una persona o un grupo de personas. Puede ocurrir que en una vivienda exista uno o más hogares. Sin embargo, un hogar no puede ocupar más de una vivienda.
Se excluyen aquellas personas que estuvieron ausentes más de seis meses en el último año, exceptuándose el jefe del hogar y los niños menores de seis meses.
Los hogares encuestados por CASEN son seleccionados de manera aleatoria en viviendas incluidas dentro del marco muestral de secciones y manzanas entregado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) e incluye a hogares residentes en viviendas particulares de las comunas que son cubiertas según el diseño muestral correspondiente.
La Encuesta CASEN es respondida por una persona que entrega información por todos los integrantes del hogar. Esta persona, denominada informante idóneo, es el jefe(a) de cada hogar, o en su defecto un integrante del hogar mayor de 18 años.
El jefe/a de hogar es aquel miembro (hombre o mujer) considerado como tal por las otras personas del hogar, ya sea por razones de dependencia económica, parentesco, edad, autoridad o respeto. En todos los hogares se identifica un solo jefe/a.
Un núcleo familiar es una parte de un hogar (es decir, un subconjunto de sus miembros) y puede estar constituido por una persona sola o un grupo de personas. Comúnmente corresponden a parejas o adultos/as junto a una o más personas que dependen de ellos/as. Puede ocurrir que en un hogar exista uno o más núcleos familiares. Sin embargo, no puede darse que un núcleo familiar esté distribuido en más de un hogar.
Medición de la Pobreza
En la actualidad, la pobreza es medida a nivel oficial a través de dos metodologías: la medición de pobreza por ingresos y la medición de pobreza multidimensional.
La medición de pobreza por ingresos identifica al conjunto de hogares cuyo ingreso total mensual no supera el valor de la línea de pobreza y que, por tanto, no cuentan con ingresos suficientes para satisfacer el consumo de un conjunto básico de bienes alimentarios y no alimentarios. Dentro del conjunto de hogares en situación de pobreza por ingresos, además, se identifica a un conjunto de hogares en situación de pobreza extrema, que corresponde a hogares que cuentan con ingresos inferiores a 2/3 del valor de la línea de pobreza vigente.
De acuerdo a la metodología vigente de medición de pobreza por ingresos (introducida en el mes de enero de 2015 y que reemplazó a la metodología tradicional de medición que estuvo vigente desde el año 1990), los valores de la línea de pobreza y de la línea de pobreza extrema dependen del tamaño del hogar (aumentando de modo no proporcional al número de integrantes del hogar) y son los mismos tanto en zona urbana como rural y en todas las regiones del país.
Por su parte, la medición multidimensional de la pobreza identifica a aquellos hogares que no logran alcanzar condiciones adecuadas de vida en un conjunto de cinco dimensiones relevantes del bienestar, entre las que se incluye: (1) Educación; (2) Salud; (3) Trabajo y Seguridad Social; (4) Vivienda y Entorno; y, (5) Redes y Cohesión Social (dimensión, esta última, que se agrega a contar de la medición multidimensional de la pobreza realizada en el año 2015).
A su vez, cada una de estas dimensiones está integrada por tres indicadores dicotómicos que permiten observar si el hogar presenta o no algún tipo de carencia. La suma de carencias que enfrenta el hogar determina si el hogar y todos sus integrantes se encuentran o no en situación de pobreza multidimensional. Cuando un hogar acumula un 22,5% ó más de indicadores en carencia sobre el total de indicadores que conforman la medida, dicho hogar se encuentra en situación de pobreza multidimensional.
Si bien estas mediciones son independientes entre sí (estar en situación de pobreza por ingresos no supone, necesariamente, encontrarse en situación de pobreza multidimensional y viceversa), en conjunto, ayudan a construir un diagnóstico global en torno a la magnitud y características de los hogares y personas que se encuentran en situación de pobreza en el país.
La medición de la pobreza de acuerdo a estas dos metodologías es realizada de manera simultánea con información estadística levantada por la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN), instrumento con cobertura nacional cuya realización está a cargo del Ministerio de Desarrollo Social y Familia.
Desde el año 1990, por medio de la suscripción de convenios bilaterales, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), ha prestado asistencia técnica al Ministerio de Desarrollo Social y Familia en el proceso de medición de la pobreza con datos de la Encuesta CASEN.
Según las cláusulas establecidas en los convenios respectivos, CEPAL ha sido la institución responsable en las etapas de medición de los ingresos, cálculo y aplicación de líneas de pobreza y pobreza extrema, corrección por falta de respuesta y edición de variables seleccionadas de ingresos del trabajo, subsidios y transferencias estatales desde el año 1990 y hasta el año 2017. Hasta el año 2013, además, estuvo a cargo de realizar el proceso de ajuste de las variables de ingresos a la cuenta de ingresos y gastos de los hogares del Sistema de Cuentas Nacionales (proceso que deja de efectuarse en el marco de la nueva metodología de medición de la pobreza por ingresos establecida en enero de 2015).
Respecto de la medición multidimensional de la pobreza, desde el año 2014, el Ministerio ha contado con la asesoría técnica y supervisión de la Iniciativa sobre Pobreza y el Desarrollo Humano (OPHI), de la Universidad de Oxford. Dicha institución ha liderado el estudio de la pobreza multidimensional en el mundo, contribuyendo al desarrollo de las primeras mediciones globales realizadas por Naciones Unidas y asesorando a diversos países en el diseño e implementación de mediciones de pobreza multidimensional.
Finalmente, se destaca el papel cumplido por el panel de expertos, comisión integrada por académicos e investigadores que, desde el año 2013, cumple con el mandato de asesorar al Ministerio de Desarrollo Social y Familia y supervisar todas las etapas del desarrollo de la Encuesta, incluyendo el proceso de medición de la pobreza.
Un hogar en situación de pobreza por ingresos es aquel cuyo ingreso mensual es inferior a la “línea de pobreza por persona equivalente”, o ingreso mínimo establecido para satisfacer las necesidades básicas alimentarias y no alimentarias en ese mismo período, de acuerdo al número de integrantes del hogar.
Un hogar en situación de pobreza extrema por ingresos, en tanto, es aquel cuyo ingreso mensual es inferior a la “línea de pobreza extrema por persona equivalente”, o ingreso mínimo establecido de acuerdo al número de integrantes del hogar y que corresponde a 2/3 del valor de la línea de pobreza.
En enero del año 2015, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia introdujo un conjunto de cambios a la metodología que estuvo vigente desde el año 1990, iniciando una nueva serie de datos sobre pobreza por ingresos.
Entre los principales cambios que considera la nueva metodología de medición de la pobreza por ingresos se destacan:
- Actualización de las líneas de pobreza a partir de la estimación de una nueva Canasta Básica de Alimentos (CBA): La CBA, a partir de la cual se estiman las líneas de pobreza y de pobreza extrema, fue actualizada sobre la base de la VII Encuesta de Presupuestos Familiares, EPF, a fin de reflejar los hábitos de consumo prevalecientes en el país. Su composición fue determinada a partir del gasto en alimentos del quintil de hogares de menores ingresos per cápita, denominado grupo de referencia, cuyo gasto satisface en promedio el umbral de requerimientos calóricos definido por persona al día. El valor de la nueva línea de pobreza fue establecido sobre la base del gasto total de los hogares pertenecientes al grupo de referencia, excluyendo los gastos en alcohol y tabaco, y el gasto en bienes y servicios adquiridos por menos del 10% de los hogares, y considerando el aporte calórico del Programa de Alimentación Escolar. el valor de la línea de pobreza extrema, en tanto, fue establecido en dos tercios del correspondiente a la línea de pobreza.
- Cambio en el indicador de bienestar de los hogares, reemplazando el ingreso per cápita por el ingreso por persona equivalente: La metodología tradicional de medición de la pobreza comparaba el ingreso por persona de los hogares con la línea de pobreza por persona para calificar la situación de pobreza de los hogares. A fin de considerar no sólo el efecto del tamaño del hogar en su bienestar, sino, además, la existencia de economías de escala en el consumo al interior de los hogares, se incorporó la utilización de escalas de equivalencia. De tal forma, cada miembro adicional del hogar necesita menos que un incremento proporcional del ingreso del hogar para que se conserve el mismo nivel de bienestar, lo que se traduce en la definición de líneas de pobreza por persona equivalente (es decir, que dependen del número de integrantes del hogar).
- Establecimiento de líneas de pobreza y de pobreza extrema sin diferenciación por zona urbana y rural: Se elimina la distinción por zona existente en la metodología tradicional, asumiendo que no existen diferencias en el costo de la CBA para zonas urbanas y rurales.
- Modificaciones en la medición de los ingresos utilizados para la clasificación de la situación de pobreza de los hogares, incluyendo las siguientes:
- Arriendo imputado: En la metodología tradicional esta imputación se realizaba sólo en el caso de las viviendas habitadas por sus propietarios, la nueva metodología considera también las viviendas ocupadas en condición de cedida por trabajo, por familiar u otro, y en usufructo.
- Imputación por no respuesta: reemplazo de la metodología de imputación de medias, por matrices de exigencia para la imputación de datos faltantes en las variables de ingreso del trabajo y jubilaciones. Además, en el caso del alquiler imputado, se amplía la imputación para corregir la no respuesta no sólo a los hogares propietarios de vivienda, sino también a hogares residentes en viviendas cedidas por trabajo, familiar u otro, y en usufructo.
Uso de ingresos corrientes de los hogares provenientes de la Encuesta CASEN: en contraste con la metodología tradicional de medición, se abandona la práctica de realizar ajuste de los ingresos declarados por los hogares a los ingresos corrientes de los hogares provenientes de estimaciones de la Cuenta de Ingresos y Gastos de los Hogares del Sistema de Cuentas Nacionales.
Los resultados de la medición de pobreza por ingresos, considerando la metodología de medición establecida en enero de 2015 por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, se encuentran disponibles de manera retrospectiva desde el año 2006.
No obstante, es importante precisar que las publicaciones realizadas por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia (y, antes por el Ministerio de Planificación) con anterioridad al mes de enero de 2013 consideraron la metodología de medición de pobreza por ingresos que estuvo vigente hasta entonces. Por lo mismo, sus resultados no son comparables a los resultados que han sido difundidos a contar de dicha fecha.
Tanto desde la metodología de ingresos como desde la metodología multidimensional, la unidad de análisis a la que se refiere la medición de la pobreza son los hogares. Por lo tanto, si un hogar se encuentra en situación de pobreza, se entiende que todos sus integrantes comparten esta situación.
No obstante, el indicador que usualmente se toma como referencia a nivel nacional, regional y comunal es la tasa o porcentaje de personas en situación de pobreza.
El Ministerio de Desarrollo Social y Familia publica regularmente estimaciones del porcentaje de hogares y de personas en situación de pobreza en base a datos de la Encuesta CASEN.
La Canasta Básica de Alimentos (CBA) refiere a un conjunto de bienes alimentarios que se utiliza como base para definir el valor de la línea de pobreza y línea de pobreza extrema por ingresos.
Tanto la composición de la CBA como su valor es el mismo en todo el país y considera un umbral de requerimientos de 2.000 calorías diarias promedio por persona. Su definición en el marco de la metodología para la medición de la pobreza por ingresos implementada a contar del mes de enero de 2015 fue realizada sobre la base de la información proporcionada por la VII Encuesta de Presupuestos Familiares, levantada por el Instituto Nacional de Estadísticas entre diciembre de 2011 y diciembre de 2012.
El detalle de los productos y cantidades respectivas considerados en su definición se encuentra expuesto en documentos metodológicos referidos a la medición de pobreza con la metodología vigente.
El valor de la CBA fue determinado a partir del gasto de aquel grupo de hogares (estrato de referencia) correspondiente al quintil de menores ingresos per cápita que, dado su patrón de gastos en alimentos, satisface en promedio los requerimientos calóricos recomendados por persona al día.
El valor de la CBA es actualizado mensualmente de acuerdo a la variación de los precios de los productos que la componen en el IPC. El Ministerio de Desarrollo Social y Familia publica mensualmente información actualizada del valor de la CBA y de las líneas de pobreza extrema y no extrema en base a la información entregada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La diferencia entre el valor de la línea de pobreza y la CBA, es actualizada de acuerdo a la variación de precios del Índice de Precios al Consumidor (IPC), descontando los alimentos consumidos fuera del hogar.
La línea de pobreza es la medida oficial, expresada en pesos corrientes, que se utiliza como umbral para identificar al conjunto de hogares y de población que se encuentra en situación de pobreza por ingresos.
De acuerdo a la metodología de medición de la pobreza por ingresos vigente desde el mes de enero de 2015, el valor de la línea de pobreza por ingresos se estima sobre la base del gasto total de los hogares pertenecientes al estrato de referencia utilizado para la determinación de la canasta básica de alimentos, excluyendo los gastos en alcohol y tabaco, además del gasto en bienes y servicios adquiridos por menos del 10% de los hogares.
En cuanto a la línea de pobreza extrema, es el umbral que permite identificar al grupo de hogares y población que se encuentra en situación de pobreza extrema por ingresos (antes denominada “situación de indigencia”). El valor de la línea de pobreza extrema por ingresos ha sido definido en el equivalente a dos tercios del valor correspondiente a la línea de pobreza.
El Ministerio de Desarrollo Social y Familia publica mensualmente información actualizada del valor de la CBA y de las líneas de pobreza extrema y no extrema en base a la información entregada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
El ingreso considerado es el ingreso total corriente del hogar, definido como la suma del ingreso autónomo del hogar (sueldos y salarios, monetarios y en especies, ganancias provenientes del trabajo independiente, autoprovisión de bienes producidos por el hogar, rentas, intereses, dividendos y retiro de utilidades, jubilaciones, pensiones o montepíos y transferencias corrientes), las transferencias monetarias que recibe el hogar del Estado (aportes en dinero que reciben las personas y los hogares del Estado a través de los programas sociales) y una imputación por concepto de arriendo de la vivienda, en el caso de las hogares que ocupan viviendas en propiedad o de manera gratuita, sea en condición de cesión (por familiar o trabajo), o en usufructo.
Para la medición de la pobreza por ingresos, dicho ingreso es expresado en términos de ingreso por persona equivalente, vale decir como el valor ingreso total del hogar dividido por el número de miembros del hogar elevado a una potencia, llamada elasticidad de equivalencia (cuyo valor, de acuerdo a la definición utilizada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia es de 0,7 para todos los miembros del hogar).
La medición de pobreza multidimensional implementada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia toma en cuenta un conjunto de 5 dimensiones y 15 indicadores (3 indicadores en cada dimensión) que buscan identificar si los hogares alcanzan o no un determinado umbral de bienestar.
Por cada indicador en que el hogar no consigue superar dicho umbral, se contabiliza una carencia. La suma del total de carencias que registra el hogar entre estos 15 indicadores permite establecer si el hogar junto a todos sus integrantes se encuentra o no en situación de pobreza multidimensional.
En el marco de la actual metodología de medición multidimensional de la pobreza se consideran las siguientes dimensiones e indicadores:
Los hogares que se encuentran en situación de pobreza multidimensional son aquellos que acumulan un porcentaje de 22,5% ó más de carencias en los 15 indicadores individuales que se utilizan para la medición, ponderados de acuerdo al peso que les corresponde en cada dimensión.
Las dimensiones de Educación, Salud, Trabajo y Seguridad Social, y, Vivienda y Entorno tienen una ponderación de 22,5%, por lo tanto, cada uno de los tres indicadores que las componen tiene un peso individual de 7,5%.
Por su parte, la dimensión de Redes y Cohesión Social tiene una ponderación de 10%, por lo que cada uno de sus tres indicadores tiene un peso individual de 3,3%.
Para que un hogar se identifique en situación de pobreza multidimensional debe presentar un número igual o superior a 3 indicadores en carencia correspondientes a cualquiera de las primeras cuatro dimensiones (equivalente al peso completo de una de estas dimensiones). También se encuentran en situación de pobreza multidimensional los hogares que presenten carencias en los 3 indicadores de la dimensión de Redes y Cohesión Social y que presenten carencias en al menos 2 indicadores de las restantes dimensiones.
Un “área pequeña” es una subpoblación para la cual las estimaciones realizadas en base a métodos estándar (como es el caso de estimaciones directas realizadas a través de una Encuesta) son inadecuadas, debido a que si la muestra de la subpoblación es pequeña, entonces el estimador directo tendrá una alta variabilidad, lo que hace que éste sea muy impreciso.
Dado que el diseño muestral de las distintas versiones de la Encuesta CASEN ha maximizado la precisión en la estimación de la tasa de pobreza por ingresos a nivel país, por zona (urbana y rural), las estimaciones directas que pueden obtenerse de éste o de otros indicadores a niveles inferiores de agregación (como es el caso de las comunas) son menos precisas, lo que justifica el uso de técnicas complementarias que tienen por objetivo: (a) reducir el grado de incertidumbre en relación a la estimación a ese nivel (mejorar la precisión), y; (b) aproximarse al verdadero valor del parámetro o valor a estimar (mejorar la exactitud).
Tal es la finalidad de la metodología de Estimación para Áreas Pequeñas (SAE, por su sigla en inglés), que el Ministerio de Desarrollo Social y Familia aplica para estimar la tasa de pobreza por ingresos (porcentaje de población en situación de pobreza por ingresos). Sus resultados han permitido disponer de una serie comparable de datos que constituye la información estadística oficial para todas las comunas del país que tienen presencia en la Encuesta CASEN (en años en los cuales no se dispone de información representativa a nivel comunal) y que es informada anualmente a la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere) del Ministerio del Interior para la asignación del Fondo Común Municipal (FCM).
La metodología en particular que aplica el Ministerio de Desarrollo Social y Familia toma como modelo la desarrollada por el U.S. Census Bureau para estimar las cifras oficiales de pobreza a nivel local y que sirven como base para la distribución de fondos públicos entre localidades, integrando, además, las mejores prácticas recomendadas en la literatura especializada.
En términos simples, el método propuesto consiste en estimar la tasa de pobreza a nivel comunal como un promedio ponderado entre la estimación de la tasa de pobreza directa (obtenida a ese nivel con datos de la Encuesta CASEN) y una tasa de pobreza sintética (estimada en base a un conjunto de indicadores procedentes de fuentes administrativas y censales que están disponibles para las mismas comunas).
La ponderación que se utiliza en este procedimiento, es determinada a partir de la varianza que tiene asociada la estimación directa de pobreza obtenida desde la Encuesta y de la varianza proveniente de la estimación sintética. Mientras más pequeña sea la varianza asociada a la estimación directa, mayor será la ponderación que se le otorgará a esta estimación en la determinación de la tasa de pobreza y viceversa.
En el caso de comunas que no son cubiertas en la muestra de la Encuesta CASEN no es posible contar con estimaciones directas, ni tampoco es factible aplicar el método de estimación para áreas pequeñas que el Ministerio de Desarrollo Social y Familia utiliza para estimar la tasa de pobreza por ingresos a nivel comunal.
Dada esta restricción, para estas comunas se aplica una metodología auxiliar, denominada Imputación de Medias por Conglomerados (IMC), que identifica grupos de comunas con similares características (conglomerados) según el Censo de Población 2002 y asigna a cada comuna el promedio de la tasa de pobreza del conglomerado de comunas al cual pertenece en base a la información aportada por la Encuesta CASEN. Por tratarse de una imputación, este dato no está asociado a un intervalo de confianza y su error muestral no es conocido.
Medición de los Ingresos
El ingreso autónomo del hogar está compuesto por la suma de ingresos percibidos por los integrantes de un hogar por concepto de: sueldos y salarios, monetarios y en especies, ganancias provenientes del trabajo independiente, autoprovisión de bienes producidos por el hogar, rentas, intereses, dividendos y retiro de utilidades, jubilaciones, pensiones o montepíos y transferencias corrientes.
Los quintiles de ingreso autónomo corresponden a grupos de igual tamaño conformados por la quinta parte (20%) de los hogares ordenados en forma ascendente (del I al V) de acuerdo al ingreso autónomo per cápita del hogar, donde el primer quintil (quintil I) representa al 20% de menor ingreso y el quinto quintil (quintil V) representa al 20% de mayor ingreso.
Los deciles de ingreso autónomo corresponden a grupos de igual tamaño conformados por la décima parte (10%) de los hogares ordenados en forma ascendente (del I al X) de acuerdo al ingreso autónomo per cápita del hogar, donde el primer decil (decil I) representa al 10% de menor ingreso y el décimo decil (decil X) representa al 20% de mayor ingreso.
El ingreso monetario del hogar está compuesto por la suma de ingresos percibidos por los integrantes de un hogar por concepto de ingreso autónomo (que incluye: sueldos y salarios, monetarios y en especies, ganancias provenientes del trabajo independiente, autoprovisión de bienes producidos por el hogar, rentas, intereses, dividendos y retiro de utilidades, utilidades, jubilaciones, pensiones o montepíos y transferencias corrientes) y por concepto de transferencias monetarias que recibe el hogar del Estado (aportes en dinero que reciben las personas y los hogares del Estado a través de los programas sociales).
Los quintiles de ingreso monetario corresponden a grupos de igual tamaño conformados por la quinta parte (20%) de los hogares ordenados en forma ascendente (del I al V) de acuerdo al ingreso autónomo per cápita del hogar, donde el primer quintil (quintil I) representa al 20% de menor ingreso y el quinto quintil (quintil V) representa al 20% de mayor ingreso.
Los deciles de ingreso monetario corresponden a grupos de igual tamaño conformados por la décima parte (10%) de los hogares ordenados en forma ascendente (del I al X) de acuerdo al ingreso autónomo per cápita del hogar, donde el primer decil (decil I) representa al 10% de menor ingreso y el décimo decil (decil X) representa al 20% de mayor ingreso.
Un índice de desigualdad es una medida que resume la manera en que se distribuye una variable entre un conjunto de individuos. En el caso particular de la desigualdad en los ingresos, la medición se asocia específicamente al ingreso de los hogares o personas, considerando diferentes conceptos o tipos de ingreso (por ejemplo: el ingreso autónomo, ingreso monetario o ingreso del trabajo).
A nivel mundial se utilizan diferentes medidas de desigualdad, entre las que destacan el coeficiente de Gini y las medidas de extremos. Dichos indicadores son medidos de manera regular por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia con datos de la Encuesta CASEN:
- Coeficiente de Gini. Es la medida más común de desigualdad. Mide el nivel de concentración que existe en la distribución de los ingresos en la población a partir de un valor 0 para una población en la que los ingresos son totalmente iguales entre todos sus miembros, hasta un valor 1 para una población en la que todos los ingresos los concentra una sola persona, es decir máxima desigualdad.
- Las medidas de desigualdad por extremos. Estos indicadores tratan de identificar qué proporción del ingreso total lo concentran los que más ganan (extremo superior) o los que menos ganan (extremo inferior), estableciendo relaciones entre estos extremos. Los indicadores de este tipo utilizados habitualmente en Chile son los índices 20/20, 10/40 y 10/10:
- El índice 20/20 corresponde al cociente entre el ingreso mensual promedio per cápita del 20% más rico de la población y el 20% más pobre.
- El índice 10/40 muestra igual relación, pero entre el 10% más rico y el 10% más pobre.
- El índice 10/40, por su parte, muestra la relación entre el 10% más rico y el 40% más pobre.
En el caso de Chile, estos indicadores son calculados para los ingresos autónomos, es decir, los ingresos de provienen de la propiedad de los factores productivos, y para los ingresos monetarios, es decir, incluyendo las transferencias provenientes del Estado. Lo anterior permite visualizar la capacidad que tienen estas transferencias para reducir la desigualdad.